El secreto de Haruka Nogizaka

Basado en la novela ligera de Yusaku Igarashi con ilustraciones de Shaa y animada por el ya ahora extinto estudio de animación Barcelona, llega Nogizaka Haruka no Himitsu, anime de comedia romántica con algunos toques de fan service.

La historia nos cuenta la vida de Haruka, una joven de 16 años quien es un prodigio en su escuela: es la mejor practicando artes marciales, alumna de cuadro de honor, representante de Japón en un concurso de piano en Viena y ganador de este dos veces consecutivas, hija de una prestigiosa y millonaria familia de abolengo y por si fuera poco es la chica más deseada por los varones de su escuela quienes la consideran muy hermosa, además de ser la envidia y modelo a seguir de todas sus compañeras. Sin embargo, todo esto puede opacarse o hacerle perder su reputación si su más profundo secreto es descubierto: es fanática del anime y del manga.

Haruka con su colección de revistas 

El protagonista masculino, Yuto Ayase, descubre este secreto cuando por asares del destino choca con Haruka en la biblioteca y ésta deja caer la revista Inocent Smile, cuyo contenido aborda el anime y el manga, pero en especial una serie de la que es fanática Haruka. Esto da inicio a una amistad que poco a poco comenzará a convertirse en romance, con constantes visitas a convenciones y a Akihabara, el lugar por excelencia en Tokio para los fanáticos del anime, el manga, la computación y los aparatos electrónicos.

Conforme la serie avanza, Yuto conocerá a muchos otros personajes: Mika Nogizaka, la hermana menor de Haruka quien a sus 14 años sabe mucho más de las relaciones adultas que su propia hermana, además de tener cierto interés amoroso por Yuto; Hazuki Sakurazaka, jefa de la servidumbre en la mansión de Haruka y amiga de toda la vida de ella; Nanami Nanashiro, la tercera en rango en la servidumbre de la residencia Nogizaka y amiga de Mika. En la escuela sobresale Shiina Amamiya, alumna de intercambio y que conoce a Yuto porque chocó con ella 3 veces no consecutivas en Akihabara, en lo que ella llama “cosas del destino”. Comienza a sentir algo por Yuto para cerrar este cuadrado amoroso.

Arriba: Nanami, Haruka y Hazuki. Abajo: Shiina y Mika 

La serie aunque predecible llega a ser bastante entretenida con bastantes referencias al mundo del anime y del manga, el cosplay (disfrazarse de tu personaje favorito), las figuras de colección, los videojuegos y muchas cosas más. Está llena también de elementos de fan service, es decir, las típicas escenas comprometedoras (que rarísima vez suceden en la vida real) entre el protagonista masculino y alguna de las chicas (acercamientos muy íntimos, que él vea la ropa interior de las chicas, caídas comprometedoras y estratégicamente diseñadas para dar pauta a un beso, etc.), aunque no se abusa mucho de estas escenas.

Antes que me digan que la trama principal es quizás exagerada (y a veces en la serie si se exageran algunas cosas) déjenme hacer un pequeño “corte cultural”. En Japón, a las personas que tienen un hobby o pasatiempo ya sea fuera de lo común o que lo llevan a niveles donde ese hobby pasa a ser un estilo de vida, se les conoce como otakus. Así, hay otakus de anime, de manga, de cosplay, de objetos o temas militares, de algún libro en particular, etc. Generalmente la visión de las personas en general hacia los otakus es que son personas carentes de vida social, personas que no les gusta fraternizar con otras personas que no sean de su medio. Obviamente esto es prácticamente un cliché, ya que hay personas con estos hobbies, pero que no rayan en lo obsesivo o en lo enfermo. En países occidentales, muchos fans del anime y el manga se autoproclaman otakus,  aunque en Japón la palabra es despectiva. Otros, o algunos japoneses también, deciden llamarse “akiba-kei”, es decir, una persona que frecuenta o es fan de ir a Akihabara. Este término es más aceptado en Japón y en occidente tiene un poco dividida a la comunidad que no sabe si llamarse “otakus” o “akiba-keis”.

Yuto y Haruka siendo observados por sus compañeros celosos 

Por lo arriba descrito, es normal que Haruka sienta temor de exponer su hobby hacia los demás y esta razón hace que tanto ella como Yuto se acerquen tanto, ya que con el tiempo él también le irá tomando cariño a este pasatiempo tan interesante.